Pudin de magdalenas

No puedo evitarlo, me encanta este postre desde que lo descubrí. Además de ser supersencillo, es un postre donde aprovechas las magdalenas duras que tengas por casa, como ha sido mi caso. Tenía varias magdalenas que se habían quedado dura, y ¿cuál es la reacción que solemos tener? "esto está más duro que una piedra" y directas a la basura... pues NO, con esta receta, casan a la perfección. Son las que precisamente vamos a utilizar y váis a comprobar que el resultado es perfecto, y nadie notará que esas magdalenas estaban duras, pues queda suave suave... os lo aconsejo, pues es un postre con el que váis a triunfar.
A mí ya me lo han pedido más de una vez... y me ha tocado hacerlo para llevarlo a Sevilla a mis hermanos, a mis padres y a mis suegros entre otros. Y yo, por supuesto, encantada de la vida.
¡¡ Espero que os guste !! que aunque veáis mucho texto es muy facilito.

Ingredientes

Foto y receta por La Flor del Azafran

• 2 magdalenas grandes o 3 medianas
• 400 ml de leche
• 4 huevos
• Sirope de fresa
• 100 gr de azúcar
• 1 cucharadita de azúcar avainillado
• Uvas pasas
• Nueces
  

Preparación
Precalentar el horno a 180ºC.
En una cazuela ponemos a cocer la leche con el azúcar (tanto el blanco como el avainillado) durante unos 3 o 4 minutos sin que llegue a hervir.
Retiramos del fuego.
A continuación incorporamos las magdalenas desmenuzadas y mezclamos bien.
En un bol pequeño batimos los huevos suavemente y los incorporamos a la cazuela sin dejar de mover, añadimos la mitad de las pasas y las nueces y el resto las reservamos.
Ahora preparamos el molde, para ello, pondremos el sirope de fresa en el fondo y un poco por los laterales.
Vertemos la mezcla con cuidado sobre el molde, éste puede ser de silicona, de aluminio, etc... Si es de silicona, como es el mío, se os puede dar el caso que se me dió a mí: que se os abombe un poco el pudin (como podéis ver en la foto).
Para finalizar, incorporamos el resto de uvas pasas y nueces troceadas sobre el pudin, que con el peso y el tiempo, irán cayendo.
Ahora hay que cuajarlo, para ello, pondremos al baño maría el pudin, esto es, poner una bandeja de mayor volumen que el molde (es decir, que el molde entre perfectamente) con agua, cubriendo la mitad más o menos del molde del pudin.
Cubrimos con papel albal, para que no se haga demasiado por arriba y que mantenga el calor.
Introducimos en el horno previamente caliente y lo dejamos unos 25 minutos. Transcurrido este tiempo, comprobaremos si está hecho, para ello introduciremos un cuchillo o un palillo largo, si sale limpio, está en su punto.